Ese pasaje que me dejo un mensaje.

Cuando apenas empezaba mi juventud, apenas mi corazón empezaba a descubrir que podía amar y apenas entendía que el amanecer es un regalo y el atardecer una obra de arte; te encontré a ti, a ti y a ese lugar que creamos juntos, aquel lugar que le llamábamos “secreto” y que era él quien guardaba nuestros secretos, era nuestro cómplice junto con la noche, ese lugar que nos enseño a ser niños y a ser adultos, aquel lugar al que le estaré eternamente agradecido porque siempre será parte de mi vida porque me hizo maduro aun antes de tiempo. Nosotros que logramos crear tantas cosas junto a él, nos dejamos llevar por la imaginación y la pasión, el nos vio unirnos en cuerpo y alma incluso más de lo debido pero jamás nos traiciono, siempre estuvo ahí para nosotros aunque lo dejáramos por algún tiempo, al regresar seguía ahí, tal cual lo dejamos, con un aspecto engañoso que no demuestra lo que es, es NUESTRO LUGAR, aquel lugar que no otorgo inolvidables momentos, como aquel momento donde dejábamos de ser dos para ser uno cuando aun no entendíamos que la unión ya era única y había un lazo irrompible… Más que nunca agradezco a ese lugar que me hizo estar enamorado y sobre todo me hizo mucho mejor, hoy más que nunca se que al envejecer seguiré yendo a ese lugar a encontrar las cosas que deje ahí guardadas y solo espero poder seguirlo visitando junto a ti… Porque todos tenemos un lugar que es solo NUESTRO y yo tengo la suerte de encontrarlo a temprana edad. GRACIAS