Las marcas que dejaron mis heridas

Cada mal paso que damos en la vida nos deja una herida que a la postre se convertirá en una marca, que visible o no, no importa porque no deja de ser una marca, esas marcas que se generan podrá condicionarnos o enseñarnos de lo vivido; al final no importa, porque seguramente volveremos a cometer el mismo error y tendremos una marca aun más grande; no importa cuanto se haya vivido, al final siempre habrá cosas que recordar y yo las recuerdo gracias a mis marcas. Me he pasado la vida perdiendo personas y oportunidades así que tengo mucho de que arrepentirme pero no lo suficiente como para dejar de vivir así que me tatuó; no tengo tantos tatuajes como para decir que tengo una mapa en el cuerpo pero sin los suficientes para recordar cada cosa importante que hice en mi vida o que deje de hacer; algunos me pregunta que es la tontería que tengo en la mano, es tal vez mi perdida mas grande traducido al chino para que pueda entrar en mi brazo, mientras que el apellido que llevo tatuado en el anverso del brazo significa lo agradecido que estoy con la persona que me trajo a este mundo. A lo largo de mi vida he podido decir muchas veces que me he avergonzado o arrepentido pero mis tatuajes son aquellas marcas que llevo con orgullo, son la muestra de mis batallas, muchas de ellas contra mi mismo y jamás me arrepentiré de ellos, me siento feliz de poder decir que llevo en mi cuerpo los errores y perdidas de mi pasado que espero poder corregir para ser mejor en el futuro.